En sí las actividades dirigidas son una gran opción , el “pero” somos nosotras, el propio usuario. Nos exponemos a movimientos combinados , mezclados con ritmos musicales y bajo fatiga derivada de un volumen alto de repeticiones y no conocemos los patrones básicos de movimiento, ni quietos,ni haciendo una sola sentadilla, ni alejando un peso, ni atrayéndolo a nosotros.